divendres, 14 de maig del 2010

Qué cosas tiene la vida

Tengo sueño, me duelen los pies, un poquito la cabeza, la tripa da vueltas, creo que podría ser por algún que otro chupito de esos que nos hicimos ayer.
Os cuento, estuve todo el día muy tranquila. Fuí a trabajar y cuando terminé fuí a mi antiguo trabajo a ver si, por fín, conseguía que me pagaran el dinero que me debían. Y bueno, la cosa fué así: Pido llamar a la chica encargada de dar los cheques y tal...

- Sísí, pasa...

Entro a su despacho.

- Hola Rebeca que tal?
- Muy bien y tu?
- Bien, gracias.
- Bueno, venía a devolveros el uniforme y a ver como estaba el tema del cobro.
- ¿Pero tu no has cobrado aún?
- Mmmm... no!
- Bueno, espera a ver, hablo con el contable y a ver qué me dice.
- ...
- De momento no tenemos aquí el cheque pero... ¿es muy urgente?

Que si es muy urgente me dice... pues claro que es urgente, es mi dinero, estoy en números rojos, claro que es urgente!!! Pero tu sabes en qué tiempos estamos?

- Mujer pues... sí!
- Bueno, pues mmm.. nose, bueno, yo ahora hablo con el contable y a ver si para el lunes o martes lo podemos tener aquí eh!
- Ah, bueno... gracias.

Total, que llegas, das la cara, porque claro, a ver a quién le gusta ir a reclamar pagos... (a mi no, desde luego), pasas verguenza, y encima que no te pagan, te vas con la cabeza baja y sin un duro.

Al final salí medio tambaleando y dije: ale, me voy a ver a mi abuela.
Y la veo, y la mujer pues no tiene memoria ni me reconoce pero yo voy a verla porque es mi abuela. Llego, me siento con ella, y después de media hora de intentar que te reconozca cuando sabes que no lo va a hacer, desisto y le digo:

- Abuela, dime el rezo tan bonito ese que te sabías tu.

No se acuerda de mi, ni de sus hijos, ni de nada ni de nadie pero le pides que reze y ella reza. Y no te reza un padre nuestro no, te reza algo que dura más de cinco minutos y se acuerda como si lo tuviera escrito en la palma de la mano. Ay! Qué cosas tiene la vida...

Luego fuí a tomar una cervecita, otra, a cenar (una copita de vino), y luego a tomar el café y una misteleta, lo que se transformó en un ambiente de humo y alcohol y unas ganas inmensas de quedar-me allí, con esa gente que hacía tanto tiempo que no veía. Mis ansias de colegueo y de juerga fueron tales que empezamos con los preparativos:

UNA APUESTA

Esto, chicos siempre le da emoción a la noche y anima a tus amigos a tomar una copa más... que deleite, una copa más, lo que significa que hay posibilidades, que la cosa se anima y que hoy, puede ser una gran noche!
¿Qué pasó?¿Porqué de repente me acuerdo de que mañana tengo que trabajar?
Es el peor momento de la noche, estás genial, con buena compañía y, de repente, ataque de responsabilidad, JODER!! Y claro, te entran las dudas, y si lo dices, les entran dudas a tus colegas también, te vuelves pensativo... pff.. !! me tengo que ir, me tengo que ir, me tengo que ir, y al final lo dices:

- Chicos, yo me voy que mañana trabajo.
- Andaa!! Pero si acabas de llegar, va! tómate una más y luego te vas a casa

Y eso, los muy cabrones, lo dicen porque me conocen, porque saben que si tomo una copa más, me pongo a bailar encima de la mesa y me quedo.

Ayer pude, lo hice, lo pensé mucho y al final dije:

- No, no, me voy!